Si se considera que aprehender implica el hecho de que el ser humano opte por apropiarse del mundo de una determinada manera, transformando la realidad y en el proceso transformandose a sí mismo, definitivamente el aprendizaje no puede considerarse algo trivial; por el contario, es trascendental en la vida personal académica y laboral de cualquier persona. En este mismo sentido, tampoco puede observarse y medirse con base en unas simples preguntas a propósito de algunos contenidos programáticos cualesquiera, ya que en un examen se pueden valorar la comprensión o la memorización de datos, la solución de problemas o la aplicación de fórmulas o procedimientos, pero no los cambios personales. El aprendizaje implica un proceso de transformación personal, por lo tanto, el énfasis no debe estar en los contenidos o en el proceso de enseñanza-aprendizaje, sino en la identidad personal y el proceso de transformación del alumno. En otras palabras, la evaluación debería centrarse en los cambios que el alumno manifiesta en sus habilidades, actitudes, valores, hábitos, relaciones interpersonales, capacidades, etc., como resultado de cursar una asignatura o módulo.
domingo, 1 de febrero de 2009
Concepciones de aprendizaje
En su cuadro sinóptico “Concepciones de aprendizaje”, Pere Marqués nos presenta de manera sintética siete concepciones de aprendizaje desarrolladas, primordialmente, durante la segunda mitad del siglo XX: Conductismo, Procesamiento de la información, Aprendizaje por descubrimiento, Aprendizaje significativo, Cognitivismo, Constructivismo y Socio-constructivismo. ¿Cuáles de estas concepciones son más congruentes con el enfoque de competencias que propone la Reforma Integral de la Educación Media Superior y por qué? Considero que las perspectivas de aprendizaje más afines con el desarrollo de competencias son el aprendizaje por descubrimiento, el aprendizaje significativo, el constructivismo y el socio-constructivismo; a continuación se menciona por qué.
El Aprendizaje por descubrimiento atribuye gran importancia a la actividad directa del alumno sobre la realidad, la aplicación práctica del conocimiento y su transferencia a diversas situaciones y con ello nos remite a la acción, elemento muy importante en el desarrollo de competencias genéricas, disciplinares y profesionales. El Aprendizaje significativo, por otra parte, privilegia la significatividad y la funcionalidad del aprendizaje sobre la memorizacion de contenidos y, al hacerlo, pone como eje al alumno y su estructura afectivo-cognitiva desde la cual comprende y resuelve la realidad; en este sentido, destaca el interés del alumno, sin el cual la acción seria insuficiente para movilizar los esquemas involucrados en el proceso. El Constructivismo se plantea como una idea fuerza que resume las dos posturas anteriores (acción-interés), destacando el papel activo del alumno al transformar el conocimiento y a sí mismo, como resultado de la combinación distintiva de su capacidad cognitiva, sus conocimientos previos y su interacción con el medio, de tal manera que nos proporciona una base mas sólida para abordar un proceso formativo enfocado al desarrollo de competencias. Finalmente, el Socio-constructivismo conserva las características distintivas del constructivismo, pero amplia su perspectiva de aprendizaje al introducir un aspecto central en el desarrollo de las competencias: el contexto; ya que en esta perspectiva se concibe al aprendizaje como una experiencia social y se rescata el valor del lenguaje como herramienta mediadora que puede ofrecer una estructura de apoyo al estudiante. Considero que es en esta última concepción en la que se puede situar mejor a la Educación basada en competencias.
El Aprendizaje por descubrimiento atribuye gran importancia a la actividad directa del alumno sobre la realidad, la aplicación práctica del conocimiento y su transferencia a diversas situaciones y con ello nos remite a la acción, elemento muy importante en el desarrollo de competencias genéricas, disciplinares y profesionales. El Aprendizaje significativo, por otra parte, privilegia la significatividad y la funcionalidad del aprendizaje sobre la memorizacion de contenidos y, al hacerlo, pone como eje al alumno y su estructura afectivo-cognitiva desde la cual comprende y resuelve la realidad; en este sentido, destaca el interés del alumno, sin el cual la acción seria insuficiente para movilizar los esquemas involucrados en el proceso. El Constructivismo se plantea como una idea fuerza que resume las dos posturas anteriores (acción-interés), destacando el papel activo del alumno al transformar el conocimiento y a sí mismo, como resultado de la combinación distintiva de su capacidad cognitiva, sus conocimientos previos y su interacción con el medio, de tal manera que nos proporciona una base mas sólida para abordar un proceso formativo enfocado al desarrollo de competencias. Finalmente, el Socio-constructivismo conserva las características distintivas del constructivismo, pero amplia su perspectiva de aprendizaje al introducir un aspecto central en el desarrollo de las competencias: el contexto; ya que en esta perspectiva se concibe al aprendizaje como una experiencia social y se rescata el valor del lenguaje como herramienta mediadora que puede ofrecer una estructura de apoyo al estudiante. Considero que es en esta última concepción en la que se puede situar mejor a la Educación basada en competencias.
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